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El Caso del Obispo George Bell
El Obispo George Bishop Bell (1883-1958) fue un teólogo Anglicano, que ocupó los puestos de decano de Canterbury y obispo de Chichester. Fue también miembro de la Cámara de los Lores y un propulsor muy destacado del ecumenismo del siglo XX. Su defensa y ayuda a los refugiados durante la Segunda Guerra Mundial han convertido al Obispo Bell en una figura muy querida no solo en el seno de la Iglesia de Inglaterra pero en el marco de la historia del Reino Unido.
En 1995 un número de alegaciones de abuso sexual salieron a la luz empañando la figura del Obispo. La policía declaró que basándose en la evidencia obtenida 37 años después de la muerte de Bell esta les hubiera bastado para arrestar al Obispo de estar vivo. Aunque parece muy posible que estas acusaciones están bien fundadas la controversia ha dividido a la opinion publica del país. El periodista conservador y cristiano Peter Hitchens describió a Bell como un hombre justo y valiente que merecía la presunción de inocencia. Muchos clérigos de la Iglesia de Inglaterra salieron en defensa de Bell y la Iglesia instigo el llamado Carlile Report en el que Lord Carlile tras investigar el caso declaro que la Iglesia de Inglaterra no había sido capaz de presentar una linea de investigación firme y justa para ambos lados del debate y que por lo tanto se habían apresurado en juzgar a Bell.
En Diciembre pasado (2017) el Arzobispo de Canterbury se posicionó en favor al argumento de que Bell podría haber sido un pederasta en un comunicado oficial en el que el Arzobispo, Justin Welby explica que Bell 'ha sido acusado de haber cometido actos terribles' y ' ...El obispo Bell demostró un coraje extraordinario antes y durante la guerra pero debo recalcar que la Iglesia tiene la obligación de tomar todas estas alegaciones en contra del Obispo Bell en serio.'
La respuesta por un grupo de académicos defendiendo la memoria de Bell no tardo en atacar este comunicado del Arzobispo de Canterbury citando el Carlile Report y el daño que según ellos estas palabras del Arzobispo de Canterbury hacían no solo a la memoria de Bell pero a la Iglesia de Inglaterra en general. El Arzobispo respondió a esta carta explicando que no le era posible retractarse de sus comentarios y la carta puede leerse en este link:
Entre muchas otras cosas, Justin Welby se defiende explicando que a lo largo de la historia de la Iglesia se han encubierto muchos casos de abuso sexual y que es necesario ser transparentes y abiertos ya que ahora la Iglesia se halla bajo el escrutinio de una agencia gubernamental dedicada a la supresión de los abusos a menores.
Es una cuestión muy difícil. Un verdadero dilema moral. Yo personalmente aplaudo la integridad y valentía del Arzobispo de Canterbury en tomar una posición firme y contracorriente. Mi opinion es que en lineas generales tomar decisiones poco populares o ir contracorriente es parte esencial del trabajo de todo gran lider.
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Fuente: Church of England Daily Media Digest - Tuesday 23 January 2018
